La notación sangalense

Para cualquier estudioso de la paleografía, acudir a los manuscritos de St. Gallen significa sumergirse en la cultura del medievo cristiano y en una de sus expresiones más genuinas. Para un amante del Canto Gregoriano, acercarse a este sistema de notación musical significa beber directamente de las fuentes. Gracias al desarrollo de la "red" podemos acceder y contemplar desde nuestro lugar los manuscritos de la Biblioteca Abacial de San Gallo (Suiza). Es una verdadera obra maestra la que realizaron estos copistas benedictinos del entorno de los Alpes alrededor de los siglos IX y X de nuestra era. La visita no es sólo necesaria para cualquier científico, sino altamente recomendable para el amante del arte y las producciones bellas. Resulta sorprendente poder perderse en estas páginas. Por eso, os lo recomiendo.

Aquí está el enlace: Codices Electronici Sangallenses

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